miércoles, 3 de noviembre de 2010

Uno de derechas

Una vez me dijeron que al aprobarse la ley del matrimonio homosexual, surgirían algunos colectivos que crearían plataformas para intentar legalizar otros tipos de unión como puede ser la poligamia, y que estarían en perfecto derecho de reclamarlo igual que reclamaban gays y lesbianas sus propias reivindicaciones. Así que lo mejor sería, no abrir la caja de Pandora.

No me sorprendían esas palabras, viniendo de quién venía, alguien que sostiene las ideologías más conservadoras y católicas de este país, y que además es gay. Demasiadas contradicciones en aquellas palabras:

- El colectivo de gays y lesbianas no reclamaba un privilegio o una figura legal que no estuviera ya instaurada en la sociedad. El matrimonio como tal existe, con lo cual no son reivindicaciones para pedir privilegios respecto al resto de la sociedad, sino reivindicaciones encaminadas a conseguir la plena igualdad.
- Sigo sin entender ese papel que se adjudican algunos de defensores del conservadurismo más rancio y su proclamación en paralelo de su homosexualidad. Son dos entidades tan separadas, tan incompatibles, que no doy mucho crédito a dichas afirmaciones. Es el propio conservadurismo tan anclado en el pasado, el que niega la existencia de la propia homosexualidad.
- Como tampoco entiendo, esa defensa de la fe cristiana en alguien a quién la propia iglesia tacha de “enfermo” por nombrar sólo uno de los muchos calificativos con los que denomina dicha iglesia al colectivo homosexual.

Lamentablemente conozco demasiada gente que se autocalifica de “derechas” y va proclamando su homosexualidad a la vez. Queda fuera del alcance de mi razonamiento, no se pueden defender unos ideales, que en su propia esencia, niegan mi propio ser.

Y aparece por fin un amago del programa electoral de nuestra retrógrada derecha y pom¡, la primera en la frente. Pretender tirar por la borda todos esos derechos de igualdad adquiridos, me parece de una falta de sensibilidad escandalosa.

La denominación de la unión de dos personas es lo de menos señorías, la lucha de todos los que nos consideramos progresistas va por otros derroteros, nuestra lucha es por la igualdad y la no discriminación de ningún colectivo, así que todos queremos seguir teniendo ese derecho a decidir si queremos unirnos o no en matrimonio.

Así que declaraciones como las de Berlusconi (en las que comparó la homosexualidad con la pederastia) o las de Rajoy (intentando reventar ese derecho adquirido del matrimonio homosexualidad) están fuera de todo progreso y avance en derechos sociales, y deberíamos darnos cuenta todos y cada uno de nosotros.

¿Se está reinventando el ultraconservadurismo? ¿En serio que hay gente que los defiende? ¿Bajo qué premisas?

miércoles, 22 de septiembre de 2010

¿Cuestión de suerte?

A veces la suerte no se presenta como tal por sí misma, sólo hay que estar atento y sobre todo predispuesto para que se acabe teniendo.
Rara es la vez que estamos en esa predisposición, y hay acontecimientos, personas, actos, etc, que pasan por delante nuestra y ni siquiera los percibimos, lo importante es mantenerse alerta y visualizarlos aunque sea de refilón.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Una de ciudades

Es extraño esto de los sentimientos, a veces algo tan inmaterial como puede ser un conjunto urbanístico desordenado, puede llegar a crear una dependencia emocional que se encuentra fuera del alcance de nuestro control, supongo que tienen razón aquellos que afirman que un lugar siempre está ligado a una carga sentimental personal.
Puede que sea eso lo que me ocurra con Madrid, pero no puedo llegar a afirmarlo, generalmente no asocio sitios con personas, sino con vivencias más íntimas y personales cuyo final es una asociación de mi propia identidad con ese determinado sitio, en este caso Madrid.
No fue casualidad que el propio Velazquez inmortalizara e hiciera famoso ese cielo sobre la Casa de Campo, a veces rojizo, a veces azulado, pero tan característico de esa parte de Madrid, como tampoco fue casualidad que me quedara enganchado de ella Supongo que esa historia que mantengo escrita en mi corazón acerca de Madrid y de mí la he conseguido plasmar en la realidad y me siento bastante orgulloso de regresar una y otra vez por allí.
Estos días vuelvo a ir por allí, solo unas horas, pero seguro que le echo un vistazo a esos reyes godos de la Pza. de Oriente, o a ese Sancho Panza marchenero de la Pza. de España, o esas plazas tan madrileñas que me gustan tanto, Cebada, Paja, etc..Día seguro que se aprovecha para pensar y pensar,,y seguro que el resultado son pensamientos sanos, como deben serlo todos.
¿Qué puede enganchar de una ciudad, que no sea una conjunción de sentimientos o unas determinadas vivencias personales vividas con alguien? Mi respuesta: Muchas¡

lunes, 30 de agosto de 2010

Sahara

Y es que estos días ha saltado a la palestra la noticia de los cooperantes españoles que han sido detenidos en el Sáhara Occidental (El Aioun) por la gendarmería marroquí. Esto ha hecho que se me vengan a la cabeza miles y miles de recuerdos, en su día me impliqué bastante en esta causa y la tengo algo olvidada.
A modo de resumen, esta ha sido mi trayectoria en pro de la causa saharaui:
Cierto día me ofrecieron irme a un sitio llamado Tindouf en Argelia, en esas fechas era un auténtico desconocedor de todo lo que me esperaba en aquel sitio, solo sabía que tenía que ir a entregar una planta desalobradora a un tal Frente Polisario (incultura absoluta por mi parte que pensé que ese era el calificativo de un señor) en pleno desierto del Sáhara.
Poquito a poco me voy dando cuenta en los preparativos del viaje del sitio al que iba, que era todo mucho más complejo y sensible de lo que yo podía imaginar, empiezo a asimilar conceptos y acontecimientos como son la "Marcha Verde", el "Frente Polisario", los "Territorios Ocupados", los "Territorios Liberados", las "Wilayas", el "Muro de la vergüenza",,y sobre todo empiezo a asimilar que voy a un sitio perdido en el corazón mismo del desierto más infernal de la Tierra donde malviven más de 200.000 refugiados, que por uno u otro motivo han acabado en aquel sitio.
La estancia (o estancias porque he tenido el privilegio de ir en dos ocasiones (periodos quincenales ambos)), fue única, un antes y un después en la forma de percibir la vida misma. Tuve la oportunidad de acercarme a los territorios liberados (a un sitio llamado Birlehlu), donde se supone que un contingente de las naciones Unidas, denominado MINURSO, controla el Alto al Fuego declarado hace ya décadas por parte del Polisaio y del reino de Marruecos. En este sitio comprobé hasta donde es capaz de llegar el ser humano. Se trata de un sitio hostil, inhospito, salvaje, desalentador, etc. un sitio por el que no merece la pena luchar.
Llegué a comprender que para los saharauis es demasiado importante recuperar ese terrero (lo que se denomina Territorios Ocupados), porque es su tierra, su casa, mucho antes de la colonización española. De allí fueron expulsados, perseguidos, vapuleados, bombardeados, violados (y no solo físicamente), hasta que Argelia les otorgó ese trocito de infierno denominado Tindouf.
Para Marruecos, esos territorios les suministra poder, y dinero, demasiados kilómetros de costa para faenar en pleno Atlántico y sobre todo una herencia española en forma de minas de fosfato.
En la actualidad, Marruecos reprime cualquier posibilidad de retorno de esa tierra a sus dueños legítimos, los saharauis que aún permanecen en territorio ocupado viven reprimidos, y escondidos, sin poder alzar la voz, esperando quizás ese referendum prometido que lamentablemente pienso, jamás se va a realizar.
España tiene aún mucho que decir, pero verdad es, que Marruecos nos tiene cogido por los huevos y no conviene tenerlo de enemigo, pero tampoco podemos dejar de lado a esas 200.000 almas que en su día abandonamos.
Gracias a todos esos cooperantes y expatriados que día a día intentan facilitarles la vida a todas esas personas a las que les debemos tantas y tantas cosas, la más importante, SU LIBERTAD¡